lunes, 14 de enero de 2008

Entrevista a Isha: "Todo el mundo está buscando amor"


Hasta los 28 años tuvo una vida "muy terrenal" en Australia, pero perdió todo y comenzó un proceso de cambio de donde nació el sistema de sanación que enseña. "El amor es energía, está adentro nuestro y es incondicional", dice.

Bautizada por la prensa como 'la gurú de los famosos', Isha dice que no le molesta el rótulo pero que sólo es una parte de su labor. Y estuvo en Buenos Aires promocionando su próximo trabajo con mujeres embarazadas presas en Argentina. "Si cambias adentro, lo de afuera empieza a cambiar", afirmó .
"La gente se identifica con los famosos. Pero el rótulo pierde mucho de la tarea que hacemos de servicio a la comunidad. No paso socializando con famosos, pero no me molesta", aclara.
En su esquema de trabajo con lo recaudado de conferencias y seminarios solventan la tarea humanitaria – y gratuita – con grupos marginales como la que realiza no sólo en Argentina sino en otros países de la región.
Isha nació en Australia (habla en inglés) pero su hogar ahora está en Uruguay. “Estaba cabalgando por la playa, vi el hotel viejo y pensé: ‘¿será este?’ Ahora es un lugar hermosísimo, todo blanco”, cuenta.
Allí vive con cincuenta maestros y estudiantes ... y caballos, su gran pasión desde niña. “No tengo vida privada, trabajamos todo el tiempo”, aclara riéndose cuando se le pregunta sobre su familia.
Isha tiene 45 años y un nombre legal que no la identifica. Sin hijos, afirma que tiene “la pareja perfecta: yo misma. ¡Por fin! Siempre estaba buscando al otro, al príncipe azul”.
Sus tres libros de autoayuda se llaman La revolución de la conciencia, pero su última creación es Ojos que miran lejos, retorno a tu Atlántida, una novela autobiográfica en proceso de edición y que la autora desea llevar al cine.
La entrevista se realizó en el jardín de un hotel de Barrio Norte y ella -apenas maquillada- lució muy sencilla, vestida de negro. La acompañaban dos asistentes y un traductor.
¿Imaginaste que ibas a ser una maestra espiritual?Isha Ni en un millón de años. Yo era una cantante, entrenaba caballos de carrera, tenía una vida muy terrenal. Pero llegué a un punto donde lo que encontraba nunca era suficiente. Porque había un vacío... me di cuenta de que la única manera de sanar al mundo era sanándome a mi misma.

¿Como ocurrió ese cambio?
I. Tenía 28 años, perdí todo. Mi pareja, muchos fallecimientos en mi familia. Hubo un crash financiero en Australia y perdí mi dinero. Todo lo que yo pensaba que era, se fue. Y ahí empecé a reconstruir mi vida.

En ese punto nace Isha; ¿por qué?
I. Porque Isha es quien soy en realidad. Yo era mis miedos, mis abandonos, mis limitaciones. Era un personaje que había creado.

¿Cómo surgió tu sistema?
I. Comencé utilizando técnicas muy antiguas y los pasos se fueron desarrollando internamente. Fue una voz interna. Y comencé a seguir esta voz. A decir mi verdad, a sentir mis emociones, a permitir que el dolor existiera y que se fuera. Y a medida que esto iba sucediendo, la conciencia interna comenzó a expandirse.

¿Cuáles son las claves?
I. Las llaves llevan a un nivel muy profundo de descanso. Y también remueven las limitaciones de la mente. Tenemos cosas que nos pasaron en la vida y creemos que son reales, que nos quedan como traumas y comenzamos a ver a través de esa ventana sucia. El sistema es limpiar la ventana. Porque cuando me sano a mi misma, dejo de proyectar mi miedo en los demás.

¿Qué busca la gente cuando se te acerca?
I. Todo el mundo está buscando el amor. Pero vienen por razones diferentes: salud, problemas de parejas o con sus hijos, porque no pueden dormir bien o tienen ataques de pánico. Yo enseño desde la gente de los cárteles de Colombia hasta estrellas de cine.

¿A qué llamás amor?
I. El amor es energía y está adentro nuestro. Y esa energía es incondicional. No tiene necesidad, todo da. Una vez que te amas a tí mismo, no sientes miedo y puedes comenzar a amar de verdad. Porque la forma en que amamos, comúnmente, es controlando al otro, tratando de cambiar al otro para sentirnos seguros. Pero cuando nos sentimos seguros internamente, amamos incondicionalmente.

¿ Por qué elegiste Latinoamérica?
I. Los latinos son naturalmente espirituales, muy emotivos, muy abiertos. No están perdidos en el intelecto. Hay mucho trabajo para hacer, muchas clases sociales. Que los ricos paguen para que los pobres lo puedan hacer.

¿Qué vas a hacer en la cárcel de Ezeiza?
I. Vamos a enseñar a mujeres embarazadas. Va a ser algo grandioso porque la libertad interna no tiene nada que ver con tus circunstancias, tiene que ver con tu experiencia interior en cada momento. Puedes ser tan libre como un pájaro y no ser feliz. Estando en la cárcel, también puedes ser feliz. Porque la mayoría de nosotros vivimos en la cárcel de nuestro intelecto, de nuestro sufrimiento.

Pero una cárcel es un límite físico muy real
I. Si cambias adentro, lo de afuera empieza a cambiar. Todos tenemos adicciones, apegos, comportamientos que no sirven. Algunas personas con historia criminal es por su entorno o sus elecciones. Entonces, cuando salen deben tomar nuevas elecciones y cambiar sus vidas.

¿La violencia exterior se puede neutralizar desde el interior?
I. Seguramente, si imaginas que el afuera es reflejo del adentro. Y si tus reacciones son violentas, vas a atraer la violencia. Enfocada en la dicha, la paz, no traés esa energía. Cuando te sanas remueves toda esa ira, comienza a irse. Siempre digo: cuando me sano a mi misma, traigo paz al mundo.

América Latina es estructuralmente injusta
I. Si llego a mil personas, todos no van a cambiar pero algunos sí. La gente no es víctima de su entorno porque puede hacer una elección para cambiar. No veo la vida a través de un cristal rosa, ni llevo mi varita mágica para cambiar un entorno imperfecto, pero la gente sí puede cambiar.
Para mas informacion visita www.isha.com.

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