martes, 19 de agosto de 2008

33 pasos para reclamar tu poder interior de Stuart Wilde - PASO 28: DISCIPLINA MENTAL

A veces ser muy intelectual es una desventaja espiritual. Si eres muy inteligente, tenderás a vivir en la mente. Es razonable y agradable hacerlo. Es como si eres muy bueno corriendo, puede que te pases seis horas al día en la pista, disfrutando de tus habilidades.

Ser muy intelectual es un handicap pero no significa el fin de la búsqueda espiritual. Si no eres muy brillante, tómate un momento para arrodillarte y rezar y dar gracias a Dios. Es un gran regalo no ser demasiado inteligente.

En el Tao, ellos reverencian las desventajas. Hay un concepto extraño en esos escritos que dice que el árbol más alto es el primero en ser cortado. El árbol torcido y feo no le vale al carpintero, así que crece durante mil años. El tullido no tiene que ir a la guerra. No hace falta que actúe. Así que el inválido es reverenciado igual que el árbol retorcido. El Tao dice:

Para permanecer entero, tuércete!
Para llegar a ser derecho, permítete doblarte,
Para poder llenarte, sé hueco.....

Por supuesto, hueco significa libre de materia. Si no tienes mucho intelecto, eres libre, porque el viaje del ego al espíritu es el viaje del intelecto al sentimiento. En sentido general, los hombres se manejan con mayor cantidad de intelecto y con menos sensibilidad. Así que su viaje es el que va saliendo del intelecto y entrando en el sentimiento y más allá, hacia una percepción metafísica y espiritual del mundo. Las mujeres, en general, están más alineadas con sus sentimientos; su viaje es realmente aquietar esos sentimientos e ir más allá de su inseguridad.

Es interesante que se nos requiera ser seguros en una dimensión intrínsecamente insegura. El viaje de la mujer es diferente al del hombre. El viaje del hombre es salir, presionar, conquistar, eyacular hacia fuera, ganar, vender cosas. El viaje de la mujer es, hablando en general, aquietarse y nutrir, eso es por lo que viven más tiempo. Puede que incorporen algunos rasgos masculinos, pero a menudo, su prueba espiritual es entrar en esta dimensión física en la que ella es con frecuencia más pequeña y más débil que otros. Tiene que desarrollar una seguridad metafísica, psicológica e intelectual dentro de una dimensión en la que ella se siente intrínsecamente insegura. Por lo tanto, la búsqueda espiritual de la mujer es procesar sus sentimientos, especialmente los negativos, y convertirse en una luz radiante de positividad.

La disciplina mental para alguien que es muy intelectual es la idea de no convertir la tu mente en dios y hacerse arrogante. Entonces has de evitar pensar demasiado de alguna manera. El exceso de pensamientos es una enfermedad. Es lo que llamo “sobrepensar en la vida”. Cuando te haces demasiado mental, enredado en la actividad intelectual, esto te aleja de saber quien eres realmente. Eres un sentimiento. Cuando te vayas de este plano terrestre, te irás como sentimiento. No te vas como 21 volúmenes de la Enciclopedia Británica. El intelecto es útil porque puede hacerte ganar dinero y ayudarte a estudiar; puede ayudarte a recordar cosas. Pero, al final, eres un ser espiritual, y por tanto un sentimiento, no un concepto intelectual.

La disciplina mental se divide en diferentes apartados.

Lo primero es que has de estar de acuerdo en sentirte seguro en una dimensión intrínsecamente insegura. Lo segundo es que tienes que curarte a ti mismo de la enfermedad de sobrepensar la vida. Así que cuando veas que tu intelecto se vuelve tonto, para; empieza a alinear tu pensamiento a las cosas. Eso no es nada más que visualizar las circunstancias, por ejemplo en la oficina y te preguntas cómo se siente. ¿Cómo se siente el director de ventas? ¿Cómo se siente mi trabajo?

Dado que la Fuerza de Dios permea todo, todo emite un sentimiento. Incluso los objetos inanimados emiten un sentimiento. ¿Cómo se siente un avión?. ¿Crees que yo subo a un avión simplemente? En modo alguno. Yo miro a la energía de todo antes de subir. No subo si no siento que todo esté bien, incluso si eso significa que perderé mis citas.

Una vez, hace años, no me sentí bien acerca de un vuelo que iba de Londres a Génova. Subí de todos modos porque era joven e inseguro de mis percepciones y porque me había comprometido a ir allí. Yendo sobre los Alpes, uno de los motores explotó. No fue una situación de vida o muerte, simplemente volvimos a Londres con un solo motor. Pero volamos cerca de hora y media a la frontera suiza, y luego otra hora y media de vuelta a Londres; luego esperamos dos horas mientras preparaban otro avión y finalmente hicimos el viaje. Debí haber bajado de aquel avión; lo sabía antes de subir.

Así que cuando las cosas no se sienten bien, ten cuidado. Cuando no sabes qué hacer, no hagas nada. Recuerda eso, y ponlo en tu nevera. Cuando no sabes, no vayas. Y recuerda también, cuando dudes, no hagas nada. Si no sabes qué hacer, espera. Acumula energía, limpia, organiza cosas, busca información, pero no actúes hasta que sepas que tienes que actuar.

Piensa en esto. Si operas partiendo de tus sentimientos, nunca tendrás que tomar realmente ninguna decisión. Tomar decisiones para la mayoría es un proceso intelectual. Si algo se siente bien procedes, y si no se siente bien, no procedes. O hay un sentimiento neutral y entonces no haces nada o te mueves con cautela. Por lo tanto, si se siente bien casarse con Harry, y dices: “Te amo Harry; sí, me casaré contigo el jueves”. O dices: “No” No existe el “quizás”. Si no sabes, espera. Si se siente equivocado, definitivamente espera.

Bajo esta disciplina, la toma de decisiones cambia del caos mental de conjeturas y la agenda del ego a “Eh ¿se siente esto bien?”. Si se siente bien, procede, cuidadosamente y despacio. Mantente haciéndote la pregunta mientras progresas y percibe y evalúa los resultados de tus decisiones conforme se van manifestando, ¿Aún se sientes bien?.

Si eres una persona intelectual, tu disciplina mental es preguntarte seis veces al día “¿Cómo se siente esto?” ¿Cómo se siente este taxi? ¿Cómo se siente esta oficina? ¿Cómo se siente este cine? Busca el sentimiento. Poco a poco puedes manejar tus sentimientos sutiles para que te ayuden con su conocimiento y habilidad de modo que el intelecto no domine tu vida.

El intelecto te absorberá hacia tu energía fea, crítica personal y juicios; te hará un insatisfecho. Tendrás un triunfo y cinco minutos después el intelecto habrá convertido el triunfo en nada. Te mostrará todas las cosas que has dejado de ganar. Hiciste 20.000 dólares, pero podías haber hecho 24.000. Al intelecto le gusta quejarse y sentir compasión de sí mismo. Si no lo controlas, te volverá loco.

El viaje del intelecto al Yo Infinito conlleva llevar al intelecto a la quietud. Tu meditación, disciplinas, tiempo de silencio e introspección son componentes vitales. Si ellas, es muy duro aplacar el intelecto para permitirte sentir tu espiritualidad. Esa espiritualidad es bella. Es enorme. Tiene un vasto poder y energía, y vastas cantidades de información.

Conforme buscas el sentimiento de las cosas, gradualmente serás capaz de reemplazar al intelecto. Has de entender que, si sales del intelecto siempre estarás suponiendo cosas. No importa si todos los gráficos y mapas te dicen que se supone que sucederá eso y aquello. Hay montones de gente ahí fuera que han perdido millones por culpa de algún garabato en una página. La experiencia previa no describe necesariamente lo siguiente que va a suceder. Pero los sentimientos lo saben.

Así que, más que andar por la vida adivinando, que es lo que hace el intelecto, vete con tus sentimientos. Si ya estás profundamente en tus sentimientos, entonces purifícalos; hazlos más fuertes. Toma control de tu vida y tus emociones serán sólidas. Permanece tranquilo en tus sentimientos y esa será tu disciplina. No te preocupes de las cosas que vendrán; tú no estarás en esa línea cuando se vean.

Mucha gente está bien. Sus vidas son absolutamente brillantes, pero no pueden admitirlo. Si ves sus vidas, probablemente encontrarás tres, cinco, veinte, cincuenta cosas, que son absolutamente maravillosas. Tienes un tejado sobre tu cabeza, algún dinero para gastar, una bella familia, amigos agradables, algunos pasatiempos buenos, tu cuerpo marcha bastante bien, tienes un coche para ir por ahí. ¿Qué más necesitas?. Lo que necesitas es serenidad, no un ramillete de información mental sin sentido que gime y te hace insatisfecho. Estás con una persona y te preguntas constantemente si estarías mejor con otra, entonces vas a esa persona y encuentras que es exactamente igual. Entonces vas a por la siguiente. Te vuelves loco.

Pensar demasiado es una enfermedad terrible. Trae síntomas crónicos como la seriedad. No me importa la arrogancia y la autoindulgencia, porque soy arrogante y autoindulgente a veces, y no me importa la estupidez, porque he hecho montones de cosas estúpidas en esta vida, pero la seriedad me molesta. Huyo de la gente seria tan rápido como me llevan mis piernas. Me revuelve las tripas.

Esta vida no es seria. Es una comedia. Es un asombroso y bello viaje, pero ciertamente no es serio. La seriedad es un concepto egóico; proviene de varios factores. Uno es la inseguridad, otro la autoimportancia, ya que la gente insignificante usa la seriedad para parecer más de lo que son realmente. A veces, la seriedad se usa como manipulación, o como modo de imponerse sobre gente que uno considera inferior. Con la seriedad viene un montón de juicios y una falta de luz y risa y Fuerza Divina.

A veces, la seriedad refleja un temperamento que es menos que gracioso y magnánimo con los demás. Puede ser un snobismo intelectual. Puedes decir siempre que caminan de modo divertido. Sus nalgas están tensas como si sostuvieran una zanahoria. Creo que se sienten elegidos de dios para sostener esa zanahoria ahí hasta la muerte. Eso es por lo que siempre ves zanahorias creciendo cerca de la tumba de la gente seria. Si eres demasiado serio empieza a reír un montón; juega, pásalo bien con niños, ponte ropa tonta, haz cosas divertidas y no juzgues severamente a los demás ni a ti mismo. Hazte grande de sentimientos y la seriedad se derretirá a la luz de la nueva bondad de tu corazón.

1 comentario:

oswaldo dijo...

LA SUMATORIA DE TU INTELECTO, CREA UN SENTIMIENTO DE PAZ Y FELICIDAD EN TI DEBIDO A QUE GRACIAS A TU INTELECTO CONSIGUES TUS OBJETIVOS Y POR ENDE CREAS UN AMBIENTE AMENO EN TU MUNDO SOCIAL QUE TE RODEA CONVIRTIENDOTE EN UN SER BENEFICIOSO PARA LA SOCIEDAD. TU ERES EL DUEÑO DE TU MUNDO Y DEPENDE DE TI SI LO HACES PROGRESAR O LO DESTRUYES.